El Real Madrid olvidó hoy la Liga tras doblegar al Mallorca 0-5 y regresó al trabajo para centrarse en la Copa del Rey, competición que comenzará el próximo jueves enfrentándose al Alcoyano, un club de Segunda División B que intentará complicar el pase de los blancos a octavos de final.La victoria en el Iberostar Estadio fue balsámica para los hombres de José Mourinho, que el miércoles fueron derrotados por el Borussia de Dortmund en la Liga de Campeones. Necesitaban ganar con urgencia para olvidar sus penas y lo hicieron con solvencia ante el equipo de Joaquín Caparrós.
Después de las buenas noticias madridistas, en las que destacaron los dobletes de Cristiano Ronaldo y Gonzalo Higuaín, y el buen encuentro que completó Luka Modric, ahora es el momento de centrarse en un encuentro que, de antemano, puede ser considerado como un trámite. Sin embargo, la historia desvela que en ocasiones, este tipo de partidos pueden ser complicados para los blancos.
No sería la única ocasión que el Real Madrid tropezara en la Copa del Rey ante algún club de una categoría inferior. Todavía está reciente el choque ante el Alcorcón, que sacó los colores al conjunto que dirigía hace tres temporadas el chileno Manuel Pellegrini.
Por eso, José Mourinho no ha dado ni un respiro a su plantilla y un día después de jugar en Mallorca, sus hombres trabajaron a puerta cerrada. Para el encuentro ante el Alcoyano no podrán jugar los lesionados Sami Khedira, Xabi Alonso, Fabio Coentrao y Álvaro Arbeloa. El técnico portugués probablemente ofrezca minutos a alguno de los jugadores menos habituales.
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