El día que Gary Neville pidió fichar a Cristiano por SMS

Ambos jugadores fueron compañeros de equipo en el Manchester United



Antes de que Gary Neville tuviera la oportunidad de tener a Cristiano Ronaldo como compañero de equipo en el Manchester United, el exjugador ya conocía el gran talento de CR7 en la televisión.

Una lesión impidió que el internacional de Inglaterra viajara a Portugal para jugar un amistoso de pretemporada contra el Sporting en agosto de 2003, pero Neville fue un espectador del choque. Allí el exentrenador del Valencia comprobó que el equipo rival estaba lleno de talentos interesantes, entre ellos el adolescente Ronaldo.

"Esa fue la primera vez que vi a Cristiano jugar y se enfrentó a John O'Shea", escribió Neville en su blog de Sky Sports. "Recuerdo específicamente que hizo un movimiento en el que se internó entre O'Shea y nuestro medio centro".

Neville aseguró que al ver esa acción se mostró muy sorprendido. "Pensé: Oh Dios mío. Normalmente no se ven jugadores experimentados tan jóvenes. Se podía apreciar su habilidad con el balón y talento natural".

Neville también recuerda la emoción increíble en torno al jugador en la estela del juego. "Después del partido, envié un mensaje a mi hermano diciendo que había que ficharle y se habló mucho de él", continuó Neville. "Él hizo que todos se sentaran y tomaran nota, nunca lo había visto jugar ni había oído hablar de él antes de esa noche, pero después hubo una gran emoción y expectación entre los jugadores", dijo.

Gary Neville aseguró que todos admiraban el juego del portugués. "No había duda de que todos hablaban de Cristiano". El director técnico, Alex Ferguson, no era ajeno a la popularidad de Ronaldo y pronto firmó un acuerdo para llevarlo al Manchester United, donde pasaría a convertirse en una leyenda.

"Estaba muy crudo cuando llegó por primera vez. Tardó unos cuantos años para que su cuerpo se llenara y ganara más decisión, pero se esperaba eso de un jugador joven", recordó Neville. El inglés explicó que durante dos años y medio, se convirtió en un jugador devastador, mejorando cada vez más tanto físicamente como mentalmente.

"Sentía como si Cristiano hubiera madurado y, de hecho, se convirtió en un hombre en la Copa Mundial de 2006", añadió Neville. "Después de eso, logró ser un jugador completamente diferente, todo pareció unirse al mismo tiempo. Durante tres años, desde 2006 hasta 2009, estableció un estándar con el que solo se puede soñar", concluyó.