Ronaldo no tiene límites. Al menos se desconocen. En Japón cerró un 2016 irrepetible, el mejor año de su carrera deportiva. Triplete internacional con el Madrid, Eurocopa con Portugal y Balón de Oro a Madeira. Nunca un futbolista se atrevió a hacer lo mismo en toda la historia. 'Cristiaño' Ronaldo, que puede con todo y con todos. Incluso con Messi y Pelé.
En Yokohama acabó decidiendo una final que al Madrid se le había ido de las manos. Puso el 2-2 de penalti y marcó los dos tantos que decidieron la prórroga. Benzema puso el fútbol y Cristiano metió los goles. Tres, cuatro en una competición en la que no se había estrenado de blanco, y mejor jugador de la competición, claro. El broche de oro a un año que jamás olvidará.
Al triplete con el Madrid (segundo de blanco madridista) se añade la Eurocopa de este verano, una copa que va más allá. Si algo le faltaba era ganar algo para su país, otro mundo.
El Balón de Oro, el cuarto en su palmarés, es la guinda a sus cuatro titulazos. Cristiano juega al póker. Y a lo que quiera.
Se acaba el año, pero no se acabará Cristiano. Ni tampoco 2016. Él también es el gran favorito para hacerse con el primer premio 'The Best' el próximo 9 de enero, el 'nuevo Balón de Oro' de la FIFA después de romper con France Football. Cristiano se va a quedar con todo.
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