Ya piensa en la Champions

Sergio Ramos también ultima su regreso a los terrenos de juego. El sevillano, que arrastra una rotura de grado II en los isquiotibiales de su pierna izquierda desde el pasado 4 de febrero, se calzó ayer las botas y saltó al terreno de juego para entrenarse con el balón de la Champions, pensando ya en una reaparición que está programada para el próximo martes 10 de marzo, ante el Schalke.

Cuando cayó lesionado ante el Sevilla, los primeros diagnósticos hablaron de casi seis semanas de baja, poniendo incluso en duda su participación para el Clásico del 22 de marzo. Sin embargo, Ramos ha vuelto a adelantar los plazos de recuperación y, con casi dos semanas de adelanto, ya está trabajando sobre el terreno de juego.

Aunque ya está prácticamente recuperado, no viajará a San Mamés por precaución, pero, si no hay ningún contratiempo, volverá a trabajar con sus compañeros el domingo y el lunes entrará en la lista de convocados para afrontar la vuelta de los octavos de final de la Champions.
Con Sergio Ramos, Ancelotti recupera al líder del equipo sobre el terreno de juego. El sevillano se ha perdido los últimos cinco partidos y el Real Madrid lo ha notado, ganando únicamente tres de esos encuentros. La derrota en el Vicente Calderón por 4-0, en el primer partido de ausencia del central, y el empate ante el Villarreal del pasado domingo han puesto de manifiesto, una vez más, su importancia dentro del equipo.

Rodado al Camp Nou
Ramos no solo ha conseguido adelantar los plazos y poder jugar ante el Schalke, el próximo martes, y el Levante, el domingo 15, sino que llegará con 180 minutos al Camp Nou. Uno de los miedos que tenía el cuerpo técnico es que Ramos se plantara en el estadio del Barça sin rodaje tras seis semanas de lesión, pero el segundo capitán del Real Madrid tendrá tiempo de sobra para ponerse en forma.

Sergio Ramos ha sufrido esta temporada más problemas físicos que nunca. Ya se perdió los dos encuentros previos al Clásico de ida (ante el Levante y el Liverpool) y descansó ante el Espanyol en el segundo partido liguero de 2015, arrastrando aún la lesión que sufrió en el Mundial de Clubes.